ARABIA SAUDITA: DIÁLOGO INTERRELIGIOSO

participantes del foro sentados en un gran circulo, se ven camaras y pantallas de television
Religiones: “una forma de diversidad humana que refleja la sabiduría del Creador”.

Durante el pasado mes de mayo la Liga Mundial Musulmana (LMM) organizó en Riad el “Foro para la Promoción de los Valores Comunes entre los Seguidores de las Religiones”, que reunió a líderes musulmanes, católicos, evangélicos, rabinos y a varios académicos. Esta importante iniciativa interreligiosa, además de presentar mesas redondas, fue oportunidad para fortalecer asociaciones entre las religiones. Al final se difundió un comunicado oficial con los acuerdos suscritos, y una reflexión que reconoce que “las características únicas de cada religión deben ser apreciadas y reconocidas como una forma de diversidad humana que refleja la sabiduría del Creador”.

“Los objetivos colectivos del Foro eran alcanzar un consenso universal en el contexto de una visión de civilización común para reforzar la cooperación y la confianza entre los líderes espirituales mundiales, aprovechar sus puntos en común poniéndolos en primer plano con respecto a los principios comunes de los valores humanos, promover los valores de la moderación y la armonía, apoyar eficazmente los esfuerzos para avanzar en la tolerancia y la paz, y establecer marcos intelectuales racionales para inmunizar contra los peligros de la ideología y el comportamiento extremista, independientemente de su origen”, según se dice en el comunicado final.

Se destacaron varios ámbitos de acuerdo, entre ellos el papel fundamental de la religión para la sociedad, la base espiritual para los derechos humanos fundamentales y el rechazo a la visión de un “inevitable choque de civilización” de las futuras cuestiones religiosas. “Hay que oponerse a los intentos de obtener ventajas religiosas, culturales, políticas y económicas sin respetar los derechos ni la ética mediante formas de extremismo, arrogancia y racismo”.

Un acuerdo central del foro fue la necesidad de proteger la unidad familiar. Los líderes la definieron como el “núcleo de la sociedad” y pidieron a las instituciones internacionales -incluidas las Naciones Unidas- que protejan la integridad de la familia y la educación de los niños. El foro también puso en marcha planes para una “Enciclopedia de Valores Humanos Comunes”, un documento en el que se recogen los derechos fundamentales que hay que proteger.

El programa del foro consistió en una sesión de inauguración y tres mesas redondas, la primera de las cuales trató el tema “Dignidad humana: la (justa) igualdad entre los seres humanos y la profundidad de los puntos comunes humanos”, centrándose en la necesidad de comprender las particularidades religiosas y culturales y no ofender a sus seguidores.
La segunda sesión se tituló “Uniendo la humanidad por la bondad de la humanidad: Desmontando el concepto de conflicto inevitable y choque de civilizaciones y reforzando los valores de amistad y cooperación entre las naciones y los pueblos en beneficio de todos”, bajo el lema: “Una familia humana que se conoce, comprende y coopera, aclarando la verdad para todos”.

La tercera sesión trató el tema titulado: “El carácter instintivo de los valores humanos y su papel en la conformación del carácter de comprensión de la diversidad entre los humanos y en no convertirla en miedo, odio y conflicto, sino en diálogo, comprensión y cooperación en beneficio de todos”.

Tras las sesiones de debate, se planteó un diálogo abierto sobre las iniciativas presentadas y, se cerró con la sesión de clausura, en la que se leyó la declaración final, que incluye la declaración de los valores humanos comunes a la luz de los resultados de las deliberaciones del foro y del consenso de todos.

Abdulwahab Al-Shehri, subsecretario general de comunicaciones de la Liga, dijo que el foro está en consonancia con los objetivos de la LMM de consolidar su papel global como organización no gubernamental independiente e internacional que trabaja para dar a conocer los valores del Islam, que incluyen la cooperación para potenciar los valores comunes y construir un mundo mejor y más pacífico y sociedades armoniosas. La fundación del foro se basa en las enseñanzas islámicas que abogan por el diálogo y el trabajo conjunto, dijo, basándose en los valores comunes que ayudan a garantizar la coexistencia pacífica en un mundo diverso.

Entre los participantes en el foro se encuentran “líderes religiosos completamente independientes de cualquier orientación fuera del marco religioso”, dijo Al-Shehri, subrayando que la LMM no tiene ningún objetivo ideológico o político y que las reuniones como el foro deben estar libres de cualquier objetivo “que no sea su elevado objetivo declarado”.
Algunos de los invitados fueron el Secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, el Patriarca Ecuménico Bartolomé y el Presidente del Congreso de Líderes Cristianos, Johnnie Moore Jr., el director de asuntos interreligiosos del Comité Judío Estadounidense, David Rosen. También asistieron al acto el arzobispo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana, Ivan Zoria, así como el Secretario General de la Liga Musulmana Mundial, Mohammed Al Issa, considerado por muchos como la principal voz contra el extremismo en todo el mundo.

Para el rabino David Rosen, ha sido muy positivo en nuevo liderazgo de Mohammed Al Issa como secretario general de la Liga Mundial Musulmana: “Al Issa ha condenado enérgicamente el antisemitismo y la negación del Holocausto, ha visitado sinagogas y ha firmado un memorando de cooperación… hace dos años, junto con otros líderes musulmanes, fue a Auschwitz en el 75º aniversario de su liberación, una peregrinación trascendental y conmovedora. Sin embargo, todas las iniciativas interconfesionales de los saudíes habían tenido lugar fuera del reino, hasta la semana pasada. La asamblea multirreligiosa de Riad fue una dramática demostración de lo mucho que han cambiado las cosas.
La cobertura de los medios de comunicación saudíes fue amplia, y las reacciones, aunque principalmente en apoyo de la conferencia, han incluido críticas a la idea misma de invitar incluso a musulmanes no suníes, por no hablar de los “herejes” de otras religiones. El hecho de que esta conferencia haya suscitado un debate de este tipo dentro de Arabia Saudí es en sí mismo un logro significativo, y forma parte de un importante proceso de cambio que también se observa en otros ámbitos, sobre todo en los cambios radicales de los libros de texto saudíes, en los que se han eliminado las representaciones y los comentarios despectivos sobre el judaísmo y el cristianismo”.