Ma. D. MANTOVANI, SANTA de la COTIDIANIDAD

Entrevista a las Htas. de la Sagrada Familia de Progreso, Canelones

las tres hermanas sonrientes al lado de la gigantografia de la fundadora. estan en un templo.

 

Queridos Amigos, el pasado domingo 15 de mayo se vivió una gran fiesta como hace mucho tiempo no ocurría, ¡la Canonización de 10 nuevos santos en la Iglesia por parte del papa Francisco! Lejos de ser un «canonicemos unos cuantos que tenemos amontonados», fue un claro mensaje de poner en la palestra, como ejemplo motivador en el Seguimiento de Jesús a estos hombres y mujeres, que, si miramos detenidamente sus vidas y testimonios, coinciden todos en la sencillez, en lo cotidiano, en un inmenso amor al otro, al pobre, al alejado, al que no cuenta… en fin, claramente lo dijo el Papa: «la santidad no consiste en unos pocos hechos heroicos, sino en muchos actos pequeños de amor cotidiano». Con mucha alegría hoy compartimos con ustedes una mínima semblanza de una de las nuevas santas, María Dominga Mantovani, cuyas hijas espirituales están entre nosotros desde 1976, en Progreso, Canelones: las Htas de la Sagrada Familia, y son ellas quienes nos cuentan:

¿Quién fue María Dominga?

María Dominga Mantovani fue la primogénita de cuatro hermanos, hija de Giovanni Battista Mantovani y de Prudenza Zamperini. Nació en Castelletto di Brenzone, en la Provincia de Verona, Italia, el 12 de noviembre de 1862. Frecuentó con gran provecho la escuela primaria pero no pudo seguir estudiando debido a la pobreza de su familia. Su inteligencia, voluntad y extraordinario espíritu práctico, suplieron su falta de estudios. Desde la niñez manifestó ser muy propensa a la oración y a las cosas de Dios. La casa, la escuela y la Iglesia fueron los gimnasios que plasmaron desde la niñez su carácter y que dieron una orientación precisa a su juventud hasta los 30 años, en el seno de su familia. Se distinguió siempre por su bondad, transparencia de vida y piedad. Deseando consagrarse al Señor, conoció el designio de Dios a través del p. José Nascimbeni, quien quiso que fuera su cofundadora en la fundación de la Congregación de las Pequeñas Hermanas de la Sagrada Familia (6 de noviembre de 1892) de la que fue además primera Superiora General. Se dedicó al cuidado de los enfermos, a la enseñanza en la escuela, al cuidado de las niñas huérfanas a causa de la guerra y a guiar a las hermanas de la congregación que le habían sido confiadas.

 

¿Cuál es el carisma fundacional de vuestra congregación?

El fundador José Nascimbeni, sacerdote de Castelletto, funda el Instituto con la intención que las hermanas lo ayudaran a salvar almas. Es por ello que invita a 4 jóvenes de la parroquia, entre ellas a María Dominga, cofundadora, a consagrar su vida totalmente al Señor, y en servicio a los hermanos. Vivimos la espiritualidad franciscana y de la Sagrada Familia. Como carisma y en los lugares donde vivimos, estamos atentas a las necesidades, especialmente del pueblo pobre: las familias, los enfermos, los niños. Es por ello que en los diferentes países donde estamos, nuestras obras son variadas: colegios, jardines, residencias, Cotolengo, misión, hospitales. Nacimos en una parroquia y para colaborar en la evangelización con los párrocos. Nos dedicamos a la evangelización, especialmente en la pastoral familiar, educativa, sanitaria y socio asistencial, vocacional, juvenil y misionera. Nuestro lema es «rezar, trabajar y amar».

 

¿Desde cuándo y dónde están presentes en Uruguay; cuántas Hnas son y qué actividades realizan? 

La congregación llegó a Uruguay el 19 de marzo de 1976. Llegaron 3 hermanas para hacerse cargo del jardín de infantes y un colegio primario llamado San José y de la pastoral en la Capilla San José, de Progreso, en el predio que pertenece a los Hnos de la Sagrada Familia. Más tarde fueron asumiendo la pastoral de la salud, visitando a los enfermos de los barrios aledaños y se creó una policlínica que estuvo por muchos años a cargo de las hermanas. Con el tiempo el Colegio y la Policlínica cerraron y hoy la obra se transformó. Hoy las hermanas gestionan el Caif San José (centro de primera infancia) donde se imparte educación y cuidado a las familias con sus niños de 0 a 2 años. Ahora vivimos en Progreso 3 hermanas: Hna Antonieta Prosperi (italiana), Hna Vanessa Yanzón y Hna Carina Santillán (ambas argentinas).

 

¿Cuál es el motivo por el que creen que María Dominga fue proclamada Santa, y cuál sería su mensaje para la persona de nuestra sociedad actual?

En el año 2004 el papa Juan Pablo ll durante su beatificación la definió como «la Santa de la cotidianidad» porque no hay nada extraordinario en su vida, simplemente la cotidianidad santamente vivida. Hacer las cosas simples y sencillas de la vida con un profundo amor a Dios y a los hermanos. Hay 2 frases de Madre María, como la llamamos nosotras, que definen la grandeza de su corazón, ella decía: quiero ser «toda de Jesús» para hacerme «toda para todos». Creo que la invitación más grande que nos puede hacer hoy Madre María es «todos podemos ser santos» en un mundo donde lo que vale es la imagen de lo perfecto y la grandilocuencia, ella nos invita a vivir con sencillez y simpleza, amando y sirviendo al Señor y a los hermanos para ser felices en la vida!

 

¡Muchas gracias, queridas hermanitas, la Sagrada Familia de Nazareth siga siendo siempre modelo y guía en vuestro andar, servicio y testimonio en la Iglesia y para el pueblo sencillo! 

 

       Jorge Márquez, jardinero 

 

(En memoria de Margarita Damiani, gracias a quien -desde hace años- conservo una estampa y reliquia de Sta María Dominga)

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