VATICANO: “CONSECUENCIAS de una GUERRA SUCIA”

dos hombres y dos mujeres voluntarios de caritas estan rodeados por niños y niñas en el patio de una escuela en siria. todos levantan las manos para la foto
Caritas en Siria: van 10 años de guerra.

El Papa ha dicho: “quien hace la guerra se olvida de la humanidad, no mira a la gente, a la vida concreta de las personas. Pone delante de todo sus intereses de parte y de poder; se basa en la lógica diabólica y perversa de las armas, que es la más lejana de la voluntad de Dios y se distancia del común de la gente que quiere paz. La gente es la verdadera víctima que paga sobre la propia piel la locura de la guerra”.

El Papa ha enviado dos cardenales a Ucrania llevando ayuda humanitaria para la población. Cáritas está presente en las ciudades importantes del país y ayuda con alimentos, transporte de prófugos, guarderías para niños y sus madres, etc.; además es la fuente de información más fiable sobre el terreno.
Mientras tanto el secretario de estado del Vaticano, Pietro Parolin, ha telefoneado al ministro de exteriores ruso Serguéi Lavrov pidiendo otra vez el alto al fuego, corredores humanitarios, respeto por los civiles; pero no hubo garantías para ninguno de esos pedidos. Posteriormente Parolin comentó: “Tiene que haber apertura por parte de todos, voluntad de negociar y de encontrar acuerdos. Si cada uno está arraigado en sus posiciones, entonces no hay nada que hacer y la guerra será cada vez más mortífera y con la perspectiva de que se amplíe”.
Sobre el encuentro Francisco-Kirill que se había establecido entre junio y julio dijo: “La posibilidad de este encuentro se ha complicado. Las recientes palabras de Kirill no favorecen ni promueven un acuerdo de paz con Ucrania; por el contrario corren el riesgo de encender aún más los ánimos e ir hacia una escalada de la guerra”.

Parolin condenó tajantemente el bombardeo ruso de un hospital infantil en Mariupol: “Bombardear un hospital es inaceptable; no hay razones, no hay motivaciones para hacer eso” y recordó cómo para Putin la “operación militar especial” era destinada tan solo a las instalaciones militares de Ucrania.
Parolin dice que el Vaticano se propone en primer lugar, junto a otras organizaciones y gobiernos, detener los combates y sobre todo evitar una escalada. Parolin confiesa: “Ante lo que está ocurriendo es imprescindible preguntarse: ¿estamos haciendo todo lo posible para alcanzar una tregua?; ¿es la resistencia armada el único camino?”. Parolin valora la negociación y el diálogo como “la única forma razonable y constructiva de resolver las diferencias y evitar tragedias enormes para las poblaciones”.
Sigue apostando por la diplomacia e insiste en “la total disponibilidad de la Santa Sede para cualquier tipo de mediación capaz de favorecer la paz en Ucrania”.
Las palabras más fuertes y claras han sido sin embargo dichas por el Osservatore Romano que es el diario del Papa, con la firma de Andrea Tornielli en su editorial: “Las trágicas consecuencias de la guerra sucia en Ucrania, hipócritamente definida “operación militar especial”, están a la vista de todos por los medios con su carga de dolor: cuerpos inocentes desgarrados, niños masacrados, familias separadas, millones de prófugos obligados a dejarlo todo para huir de las bombas, ciudades transformadas en campos de batalla, edificios públicos y casas destruidas e incendiadas; sin hablar de las heridas del alma que necesitarán años para sanar. Se trata de una agresión del ejército ruso contra Ucrania y no se puede presentar con falsas motivaciones religiosas o teorías de choque de civilizaciones. Son dos pueblos que comparten la misma fe cristiana y el mismo bautismo. Es además una tragedia capaz de provocar una escalada bélica peligrosa y arrastrar a un conflicto mundial”.

Por su parte Luis Antonio Tagle, filipino descendiente de chinos y ex arzobispo de Manila, ahora presidente de Cáritas Internacional y posible papable, se quejó de que se hable de “la mayor crisis de refugiados del siglo” con respecto a Ucrania y “se olvide el martirio de Oriente Medio que ya dura décadas en Siria, Líbano, Irak, Libia..; de países de Asia (Afganistán, Birmania) y África que siembran un reguero escalofriante de miseria y destrucción”. Son 65 los conflictos hoy en el mundo. Como cuestionando el eurocentrismo, dijo Tagle: “Para Cáritas todas las guerras son igual de importantes y provocan crisis humanitarias gravísimas”.