RELIGIONES: EL PAPA Y EL ISLAM     

muro decorado con motivo de la visita del Papa a Irak. Francisco sonriente saluda con la mano en alto. Al centro la paloma de la paz sobre el contorno del mapa iraquí con su bandera y la del Vaticano. A los costados se ven palmeras y varias inscripciones en árabe. En italiano dice: larga vida al papa francisco.El viaje papal a Irak, como los anteriores a Egipto y Emiratos Árabes ha buscado no caer en la trampa del choque de civilizaciones, sino seguir la línea evangélica de san Francisco de Asís que se encontró pacíficamente hace 800 años en Damietta con el sultán de Egipto Malek al-Kamel.

A las pocas horas de la partida de Francisco, Irak invitó al Imam de Al-Azhar (Egipto) a visitar el país. Al-Tayyeb es el que firmó el documento de la Fraternidad en Abu Dhabi con Francisco. El Papa parece por lo tanto haber logrado, en nombre de la fraternidad, acercar a las dos grandes autoridades religiosas islámicas sunita y chiita: Al-Tayyeb y Al-Sistani. La “iglesia en salida” y “hospital de campaña” de Francisco se ha ocupado de los sangrientos campos de batalla de Libia, Egipto, Yemen, Siria, Irak, Somalia, Afganistán que son todos países islámicos. Hacia este Islam herido por las guerras y el terrorismo, se ha dirigido el Papa invocando la unicidad del Dios misericordioso que nos hace hermanos. El terrorismo islámico también ha producido una profunda islamofobia en occidente, alimentando los prejuicios y el rechazo. Francisco actuó de mediador entre las dos corrientes más moderadas del Islam, enfrentadas entre sí por motivos históricos, rechazando la deriva teocrática de Irán y el fundamentalismo wahabita de Arabia Saudí. Según los mismos expertos musulmanes, las jóvenes generaciones apuntan a un Islam libre de sectarismos y de la influencia del Islam político.

Por otra parte en Irán, el viaje papal a Irak ha sido prácticamente ignorado por los medios oficiales; Irán disiente del chiismo iraquí y quiere hegemonizar sobre Irak reivindicando el imperio persa. Mientras los chiitas iraquíes son favorables a la separación entre estado y religión, el modelo komeinista iraní es teocrático y clerical. A pesar de los esfuerzos de acercamiento del Papa hacia el Islam, no hay que olvidar las profundas grietas que hay entre el Cristianismo y el Islam. El Islam en general no admite la libertad de fe y pensamiento. La apostasía (= dejar la religión islámica) es un pecado más grave que el homicidio; y es castigado por la ley, en algunos casos con la muerte. El odio y la discriminación para con los cristianos está presente aún en muchos países islámicos. El Papa está poniendo los primeros ladrillos, no para construir muros sino para construir puentes.