MUJERES EN EL VATICANO: PEQUEÑOS PASOS

Hna. Nathalie: «El objetivo es trabajar juntos en la Iglesia, varones y mujeres, sacerdotes y obispos, religiosos y laicos”.

La de los pequeños pasos, pero progresivos, es la política de la Iglesia no solo con China sino en sus propias instituciones con respecto al liderazgo de las mujeres. Por primera vez una mujer tendrá derecho a voto en el Sínodo de Obispos como subsecretaria del Sínodo. Es la Hermana Nathalie Becquart de 52 años, francesa, la que se ha especializado en eclesiología con investigaciones sobre sinodalidad y ha estado a cargo de la comisión para la evangelización de los jóvenes y las vocaciones de la Conferencia Episcopal Francesa.

Ya en los Sínodos anteriores había aumentado considerablemente la presencia de mujeres como expertas o auditoras. Declaró Nathalie: “Recibo esta designación como signo de confianza hacia las mujeres en la Iglesia, las religiosas y más ampliamente los laicos. Es una respuesta a todo lo que se ha dicho sobre el desafío de involucrar a las mujeres en la toma de decisiones y en el discernimiento pastoral. El objetivo es trabajar juntos en la Iglesia, varones y mujeres, sacerdotes y obispos, religiosos y laicos”. El número de mujeres en altos cargos en el Vaticano y en la Curia, ocupados antes solo por varones, nunca ha sido tan alto como hoy (se duplicó en los últimos años).
La magistrada italiana Katia Summaria ha sido nombrada Promotora de Justicia en la Corte de Apelaciones del Vaticano. La laica Francesca Di Giovanni es la primera mujer con autoridad real sobre los obispos que trabajan en la Secretaría de Estado y sobre los nuncios apostólicos. La brasileña Cristiane Murray es vicedirectora de la Oficina de Prensa del Vaticano. Mariela Enoc dirige el hospital pediátrico del Niño Jesús, el más grande de Europa en su especialidad. Barbara Jatta, una historiadora de arte, es directora de los Museos Vaticanos, por los que pasan en tiempos normales 25 mil personas al día. Su nombramiento causó revuelo ya que en ningún otro museo, de los cinco más visitados del mundo, tiene una mujer al frente. Son aún pequeños pasos, pero que marcan un objetivo claro para todos los obispos y el clero a nivel mundial.