En el aniversario de su muerte en 1997, el 5 de septiembre es el día en el que se celebra su memoria litúrgica y la ONU celebra en memoria de ella el Día Internacional de la Caridad. Efectivamente Madre Teresa dio un testimonio asombroso de amor para creyentes y no creyentes.
El presidente de Cáritas Internacional, Luis Antonio Tagle, dijo que “para Madre Teresa la fuente última de la caridad y del altruismo era Dios porque ”Dios es amor” (1Jn 4,8) y Jesús nos dio el ejemplo acabado de lo que es el amor. Madre Teresa y sus Misioneras de la Caridad nos alientan para ser cristianos auténticos, protagonistas de una auténtica caridad”. Al morir hace 23 años, el gobierno indio le ofreció un funeral de Estado igual al que se le había tributado al Mahatma Gandhi. El papa Francisco dijo que ella no solo practicó la caridad individual sino que “hizo sentir su voz ante los poderosos de la tierra para que reconocieran sus culpas ante los crímenes de la pobreza creada por ellos mismos”. Al morir Teresa dejó como herencia suya un par de sandalias y de vestidos, una bolsa, un libro de oraciones, un rosario y nada más; murió pobre entre los pobres. Sobre su tumba están escritas solamente estas palabras de Jesús: “Ámense unos a otros como yo los he amado”.
Debe estar conectado para enviar un comentario.