El jefe de servicio de ginecología de un hospital de Cipolletti (Argentina) fue denunciado por negarse a practicar un aborto a una mujer violada en el quinto mes de embarazo. El bebé nació prematuro y fue prontamente adoptado. El médico Leandro Lastra dijo: “Este tipo de situaciones está atacando a la sociedad en su conjunto, desvalorizando la vida y también a los médicos y a nuestros códigos. Sé que no cometí ningún crimen. Es una conducta que volvería a tener porque no quiero que sobre mi pese la muerte de ninguna criatura”.