
El Papa viajó del 3 al 5 de febrero a Emiratos Árabes Unidos. La prioridad de sus viajes internacionales es visitar países “periféricos” y en especial alentar a los países musulmanes moderados para un mayor diálogo interreligioso en pos de la paz; próximamente en marzo viajará a Marruecos. Hizo un llamado a la paz en Yemen; en esa guerra civil olvidada internacionalmente, que empezó en 2015, participa también Emiratos junto a Arabia. En Yemen el 80% de la población padece hambre; ya han muerto 85 mil niños de hambre en tres años. En un comunicado final conjunto entre el Papa y los grandes imanes se rechaza la violencia en nombre de Dios y se afirma: “Construimos el futuro juntos, o no habrá futuro. Somos todos hijos del Dios misericordioso y por lo tanto hermanos”.