(cultura) Coplas del carcelero

(Letra de Armando Tejada Gómez, música de Horacio Guarany)
Esta hermosa canción interpretada por Horacio Guarany, nos habla de los presos políticos, no de los que están presos por robar o por corruptos, sino los llamados presos de conciencia.

Aquellos que por defender los derechos de las personas, y sobre todo de los más pobres se han enfrentado a las dictaduras o a las seudo democracias autoritarias.

Estamos prisioneros carcelero
estamos prisioneros carcelero
yo de estos torpes barrotes tuve miedo
yo de estos torpes barrotes tuve miedo
adonde vas que no vienes
conmigo a empujar la puerta
adonde vas que no vienes
conmigo a empujar la puerta
no hay campanario que suene
como el rio de allá afuera
como el rio de allá afuera

Como el que se prende fuego
andan los presos del miedo
como el que se prende fuego
andan los presos del miedo
de nada vale que corran
si el incendio va con ellos
si el incendio va con ellos.

No se, no recuerdo bien
que quería el carcelero
creo que una copla mía
para aguantarse el silencio
para aguantarse el silencio.

No hay quien le compre la suerte
al dueño de los candados
no hay quien le compre la suerte
al dueño de los candados
murió con un ojo abierto
y nadie pudo cerrarlo
y nadie pudo cerrarlo.

Le regalé una paloma
al hijo del carcelero
cuentan que la dejó ir
tan solo por ver el vuelo
que hermoso va a ser el mundo
del hijo del carcelero
del hijo del carcelero.

Es cierto muchos callaron
cuando yo fui detenido
vaya con la diferencia
yo preso e yo sometido
yo preso e yo sometido

Estamos prisioneros carcelero
estamos prisioneros carcelero
yo de estos torpes barrotes tuve miedo

Comentario

A pesar de todos los avances científicos, los seres humanos no hemos aprendido a dirimir nuestros conflictos mediante el diálogo, sino que mediante la imposición y la fuerza, intentamos prevalecer los unos sobre los otros. Horacio sabe bien de esto. Tuvo que exiliarse de Argentina para que no le pasara lo que le ocurrió a Jorge Cafrune o a Víctor Jara, que fueron asesinados por las dictaduras latinoamericanas que durante la década de 1970 dominaron el panorama político de nuestra patria grande.

Pero de lo que esta canción habla, no es sólo de la falta de libertad de los que como el protagonista, están privados de ella, sino de aquellos que por el miedo no se comprometen con la verdad y la justicia y viven domesticados y sin dignidad.

La figura del carcelero dominado por el miedo a los que vigila, y por el sentimiento de culpa que no lo deja dormir, es muy elocuente.

Así también Horacio deposita en la figura del hijo del carcelero sus esperanzas de que las nuevas generaciones aprendan la lección y sepan construir una sociedad libre y digna.

La poesía de esta canción y de otras llenas de sentido, hizo de Horacio Guarany uno de los cantantes más apreciados por los latinoamericanos.

No se limitó a cantar canciones de amor, o costumbristas, también supo brindarnos canciones como esta, llenas de un mensaje crítico y valiente, que nos invita a cuestionar los dogmas ideológicos y autoritarios que muchas veces envenenaron la conciencia de nuestros pueblos.

Datos sobre el autor.

Eraclio Catalín Rodríguez Cereijo, cuyo nombre artístico era Horacio Guarany, fue un cantor, compositor y escritor argentino, ganador del Premio Konex de Platino en 1985 como el más importante cantante masculino de folklore de la historia en Argentina.

La razón de este nombre se debe a que comenzó su carrera cantando canciones paraguayas en guaraní, y esto le hizo muy popular, de ahí la elección de su nombre artístico.

Su padre, Jorge Rodríguez, era un indígena correntino y su madre, Feliciana Cereijo de Rodríguez, había nacido en León (España).

Su padre trabajaba como hachero de la empresa británica La Forestal cuando el 15 de mayo de 1925, cerca de Guasuncho o de Intillaco, en pleno monte del Chaco austral, nació el antepenúltimo de 14 hermanos, Eraclio Catalín, aunque fue anotado en la cercana localidad de Las Garzas, en el departamento General Obligado y quien pasaría su infancia en Alto Verde (distrito que actualmente forma parte de la ciudad de Santa Fe).

De niño gustaba de la música, del canto, y aprendió a guitarrear con el maestro Santiago Aicardi. En 1943 viajó a Buenos Aires a probar suerte con el canto. Vivió en una pensión, y cantaba en el Barrio de la Boca en el boliche La Rueda, sobreviviendo. Trabajó luego embarcado de cocinero, y también como foguista. Se inició con la Orquesta de Herminio Giménez, cantando música paraguaya y en idioma guaraní. En 1957 debutó en Radio Belgrano de Buenos Aires, consiguiendo que su interpretación de «El mensú» (de los hermanos Ramón Ayala Vicente Cidade), se difundiera en las estaciones de radio.

Fue pionero del Festival Nacional de Cosquín, y fue un clásico, año tras año con conocidas composiciones como «Guitarra de medianoche», «Milonga para mi perro», «La guerrillera», «No sé por qué piensas tú», «Regalito» o «Si se calla el cantor».

Muchas de sus célebres composiciones musicales acompañaron las letras del gran poeta tucumano Juan Eduardo Piatelli, canciones como «Canción del perdón» o «No quisiera quererte», entre tantas otras.

Tuvo también incursiones en el cine. La película más recordada y que lo tenía como protagonista, fue “Si se calla el cantor”, filmada en 1972.

En 1974 tuvo que huir del país a raíz de una bomba que colocaron en su casa, y las amenazas de muerte recibidas.

Vuelve a Argentina en 1983 con el retorno de la democracia, constatando que a pesar de todos los esfuerzos realizados por la dictadura militar de censurar sus canciones, no había sido olvidado por su gente, sino que seguía tan vigente como antes.

El viernes 13 de enero de 2017 muere a causa de un paro cardiorrespiratorio, a la edad de 91 años, en su casa de Luján. Sus restos fueron sepultados al día siguiente en el Jardín de Paz Oeste.

 

2 comentarios sobre “(cultura) Coplas del carcelero

  1. Hola la cancion tiene un error ya que en la parte donde dice yo de estos torpes barrotes.. Sigue TU DEL MIEDO… y ustedes pusieron TUVE MIEDO

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